El tamaño y la ubicación de las ventanas, puertas y ventanas son la clave para un buen ingreso de luz natural, pero excepto que la vivienda esté en construcción, difícilmente se pueda cambiar estos elementos estructurales. Sin embargo, una pequeña reforma puede aportar muy buenos resultados.

• Si la ventana está centrada en medio de la pared, permite una luz de mayor intensidad y más uniforme. En cambio, si la ventana está descentrada, el efecto será el
• Para un mejor paso de luz es importante no obstaculizar las ventanas. Así, como evitar muebles y objetos que reduzcan el paso de luz.
• Las ventanas altas ofrecen una luz menos intensa pero más uniforme. Cuanto más alta se coloque una ventana la iluminación se trasladará hacia el fondo de la habitación de manera más homogénea. La luz alta es buena para habitaciones profundas en las que se necesite llevar una iluminación uniforme hasta el final de la habitación.
• Un truco para cocinas en pisos o apartamentos a los que no llega suficiente luz natural, consiste en eliminar las puertas y armonizar ambos Además de ampliar visualmente el espacio, estas aberturas permiten una mejor distribución de la luz.
• Una cocina con poca luz, inmediata a un comedor bien iluminado, puede integrarse con una barra americana o un cierre de aluminio acristalado, de modo que permita estar levemente separados, pero compartiendo la claridad de un ambiente a Un recurso ideal para ambientes pequeños.
• Podría ocurrir que necesitemos limitar el flujo de luz, dicho caudal puede controlarse fácilmente con persianas o cortinas.